Mundimaroc

Tinghir (Todra)

Localidad minera que sirve como centro de transporte, aunque los viajeros intrépidos pueden descubrir lugares interesantes. La garganta de Todra se halla a 12km, pero si se necesita un descanso después de conducir los 51km desde Boumalne du Dadés, lo mejor es irse hasta el extremo oriental de Tinghir, donde hay un oasis de palmeras que pintan de verde el paisaje árido y rocoso que se extiende hasta el horizonte. Allí se descubren Kasbahs en ruinas, la abandonada Medersa Ikelane del siglo XIX, que destaca por su cúpula encalada.

  • Estar entre la espada y la pared es una gran experiencia en la Garganta Todra, donde la enorme falla que divide el Alto Atlas de las del Jebel Sarhro es, en algunos puntos, lo suficientemente ancha para que sólo pase un río de aguas cristalinas o los senderistas en fila india. La carretera desde Tinerhir pasa por verdes palmerales y pueblos bereberes hasta que, a lo largo de 15 kilometros, altas paredes de color rosa y gris se cierran sobre la carretera. El acceso es emocionante, como si las puertas del cielo estuvieran a punto de cerrarse enfrente al viajero.
  • Además de excursiones de un día y alrededores, la zona ofrece oasis de palmeras y kasbahs en ruinas que son el sueño de un fotógrafo. Si se quiere seguir adelante, se podría regresar a Tinerhir a través del palmeral en tres o cuatro horas.